El poder narrativo de una prenda es mucho mas intenso cuando la espectadora es la protagonista. Una relación auténtica nace entre el personaje y la espectadora produciendo una sinfonía de emociones, sensaciones lleno de complicidad.
Los personajes se desvelan sin complejos y son portavoces de mensajes llenos de valores nobles como la reveindicación de la singularidad de cada ser, la libertad, el respeto del medioambiente, la solidaridad y la autenticidad.
Estos son los valores de la marca donde el saber ser y el saber estar son primordiales.
Esta búsqueda permanente de calidad nos ha permitido encontrar y colaborar con un equipo de profesionales españoles y franceses, gente apasionada por la artesanía, la innovación, el respeto del medioambiente y la tradición.
Y nuestro deseo mas profundo sería que estos valores perduren en el tiempo para que cada prenda, cada cuadro, cada historia sirva de ejemplo y pueda ser testigo de nuestra época y de quienes somos realmente.
Katia Juanino Juez (KJJ) es hispano-francesa: nace en Francia y pasa su infancia en Madrid. Forma parte de una familia numerosa tradicional española.
Apasionada por la pintura, sus padres le regalan un caballete, un elemento clave que le hará descubrir su talento artístico, desarrollar su imaginación y que mas tarde, se concretizará con la creación de su marca.
A los 26 años llega a Francia llena de sueños. Apasionada por sus estudios, vive experiencias profesionales enriquecedoras consagradas al liderazgo de equipos.
Después de un sueño, en una noche de verano del 2018, decide cambiar el rumbo de su vida y dedicarse a un proyecto auténtico donde pueda ser ella misma y donde pueda reflejar sus orígenes, sus valores y sus vivencias.
Primero fué la necesidad de contar momentos importantes de su vida, sus sueños de niña profundamente influenciados por sus dos países: España y Francia. De ahí, el nacimiento de sus pinturas. Pinturas sinceras, auténticas donde los personajes son portavoces de mensajes fuertes y simbolizan las múltiples facetas de la mujer de hoy en día.
La creación de ropa vino mas tarde y de manera natural, fruto de su pasión por la moda y de su deseo de proponer una nueva experiencia a sus personajes y así crear un proyecto más real y accesible.
La creación de la marca, simboliza el Alma de la creadora, un deseo de intimidad por oposición a toda forma de ostentación y con un toque de originalidad.
Nace ALMADKJ, un nombre que hace eco y que encarna la esencia de los valores de la marca.